Alrededor de 200 senderistas se unieron el pasado viernes 31 de julio a la II Ruta Senderista Nocturna 2015 que transcurrió por el valle de La Guzaina, en Sierra Grande de Hornachos.

Faltaban pocos minutos para las 21 horas cuando la explanada de la Iglesia Conventual de San Francisco comenzó a llenarse de senderistas procedentes de diversas localidades, dispuestos a caminar bajo la intensa luz de la luna llena. Junto a ellos un grupo muy especial, procedente del Centro de Mayores de Hornachos que gracias a la colaboración del SEPAD y de Cruz Roja Local de Hornachos iban a poder disfrutar también de la experiencia de vivir las noches de luna llena en Sierra Grande de Hornachos.

En el interior de la Iglesia de San Francisco, Buzalén Dúo, formado por Antonio Javier Calero y Pedro Javier Gómez, dieron el pistoletazo de salida a la ruta con un pequeño repertorio de bienvenida a los senderistas. Tras el breve concierto, y unas breves instrucciones y recomendaciones por parte de la Organización, comenzó la ruta con el Sol poniéndose sobre el horizonte.

A través del camino de la Colada de los Puertos, recientemente acondicionado, fuimos viendo caer la luz del día, mientras las luces de localidades como Llerena, Llera o Usagre se hacían más visibles en el horizonte. A nuestra izquierda la luna llena comenzó a aparecer entre los peñones de Sierra Grande, y ya no nos abandonaría durante toda la noche comentaba Sergio Cuevas, organizador de la ruta.

Tuvimos la ocasión de cruzarnos con los miembros del club de BTT Sierra Grande de Hornachos, que celebraban su I Quedada Nocturna 2015. Nuestro recorrido continuó por la senda de los Lucianes, y camino de Peñón Grande, a través del cual nos introdujimos en el valle de La Guzaina, en el que nos estaban esperando nuestros mayores para visualizar todos juntos continuaba Cuevas, y mientras los senderistas reponían fuerzas tomando un tentempié, una presentación de fotografías de Antonio Gabaldón, Director del I.E.S. Los Moriscos de Hornachos y gran conocedor de la Sierra de Hornachos, que hizo disfrutar a todos con sus conocimientos y explicaciones sobre la fauna hornachega.

Tras despedirnos de nuestros mayores, nos dirigimos al punto más alto de la ruta, el Puerto de la Cruz (775 metros), que nos dio acceso, a través del camino de La Pedriza, a la Senda Moruna, con el castillo de Hornachos al fondo iluminado bajo la luna llena finaliza Sergio. El recorrido por el Valle de Los Cristianos llevaría al punto final de la ruta, el Pósito, antiguo almacén de grano, que hoy día acoge en su interior el Centro de Interpretación de la Cultura Morisca. En él los visitantes pudieron conocer algunos datos sobre el antepasado morisco de nuestra localidad, dando así por finalizada esta ruta senderista.

Juan Francisco Llanos

Fotos: Antonio Márquez

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