Edita Nómada Cáceres. El encuentro

María Carvajal nos relata en primera persona el II Edita Nómada Cáceres evento de dinamización literaria organizado por ella que reunió a escritores, músicos y performers de toda España

Me presentaron al poeta Uberto Stabile una noche de verano de 2010. Fue en una fiesta poética en Isla Canela, justo en la casa de otro hacedor de versos, Eladio Orta, a quien yo conocía hacía ya algunos años. Tras nuestra presentación apenas intercambiamos unas palabras y después cada uno se integró en conversaciones con otros poetas asistentes a la fiesta.

Por entonces yo apenas había publicado unos cuantos poemas y relatos en un par de libros corales y en blogs de algunos amigos, y el mundo de la edición me era totalmente desconocido. Sin embargo, en 2011 asistí a EDITA, Encuentro Internacional de Editores Independientes, que llevaba desarrollándose en Punta Umbría desde 1994. Para mi sorpresa, descubrí que Uberto Stabile era el creador y director de dicho encuentro. Ese año yo no participé, simplemente asistí como acompañante de quienes por entonces eran mis editores. Allí viví cuatro días intensos donde tuve la oportunidad de conocer a una gran cantidad de editores y poetas procedentes de diferentes puntos de España y Latinoamérica. Lo pasé muy bien, pero sobre todo descubrí un mundo, insólito para mí, basado en modelos de edición innovadores y recitales de un tipo de poesía fresco y alejado de cualquier regusto rancio: versos arriesgados, comprometidos y trasgresores de poetas que tenían (tienen) mucho que decir.

A partir de ahí, invitada por Uberto, comencé a participar en EDITA año tras año y comenzó a forjarse mi amistad con él, con quien seguí además coincidiendo en otros encuentros poéticos.

En 2013, Uberto decidió llevar una pequeña muestra de EDITA a diferentes ciudades de España, Portugal, Colombia, Brasil y México con el fin de dar a conocer el encuentro a personas que nunca hubiesen asistido al que anualmente se celebra en Punta Umbría, y que debía tener la peculiaridad de que las editoriales participantes debían ser locales. Y así nació EDITA Nómada, una suerte de miniencuentros que en nuestro país pasó por Barcelona, Valencia, Sevilla, Moguer, Córdoba, Cáceres, Madrid, Granada, Monachil, y Bilbao.

En cuanto al encuentro que se desarrolló en Cáceres el 25 de octubre de 2013 solo puedo señalar que tuvo una escasa acogida tanto en participación como en asistencia. Las ponencias editoriales de esa primera edición fueron a cargo de A. C. Cabeza Pájaro, A. C. Letras Cascabeleras, Ediciones Liliputienses, Editorial Ebookprofeno y A. C. Norbanova. Los poetas participantes fueron José Cercas, Vicente Rodríguez Lázaro, Eladio Méndez, Felipe Zapico, Israel Jimeno, Jesús M. Flores, David Santiago Rodríguez, Víctor M. Jiménez Andrada, Vicente Rodríguez Martín, Uberto Stabile y una servidora, María Carvajal.

Sin embargo, aun con poco éxito, EDITA Nómada sembró en Cáceres un germen que no podía caer en suelo árido. Fruto de aquello ha sido la segunda edición del encuentro, celebrado el pasado 11 de diciembre. Y he de decir que, como organizadora del evento, no puedo estar más satisfecha con su resultado.

Hacía meses que Uberto y yo habíamos quedado en intentarlo una vez más con una segunda edición de EDITA Nómada en Cáceres. Yo estaba muy ilusionada, aunque he de reconocer que tuve cierto miedo al principio, temía que la gente no respondiese, que se repitiera la poca asistencia de la edición anterior. Por mucho que una se implique en un proyecto de estas características, el éxito y el fracaso se miden a partes iguales, y más aun cuando los participantes no cobran ni un céntimo por sus intervenciones.

Aunque de palabra ya lo había comentado antes a algunos amigos, comencé a promocionar el encuentro a finales de octubre y enseguida abrí la convocatoria de participación. Sé que me pasé con el bombardeo promocional a través de las redes sociales, pero solo así conseguí lo que ocurrió poco antes del encuentro: que todos estuviesen esperando ese día. Pero antes había mucho por hacer.

La fecha se acercaba y el listado de editoriales y poetas participantes fue creciendo. Ellos mismos se encargaron de dar difusión al evento mientras yo seguía haciendo gestiones para ultimar cada detalle. Llegó un momento en que todo comenzó a rodar y al final nos encontramos con un gran éxito tanto en participación como en asistencia de público.

Juan Valadés, director del Museo de Cáceres, ubicado en la Plaza de las Veletas, nos lo puso muy fácil a la hora de cedernos el salón de actos para el desarrollo de las ponencias y la pequeña muestra de libros publicados por las editoriales participantes (todas extremeñas). 

Las ponencias fueron a cargo de Asociación Extrebeo Cómics (Cáceres), Delika, Edition & Design (Cáceres), A.C. Letras Cascabeleras (Cáceres), Ediciones Liliputienses (Cáceres), Mordistritus (Mérida) y TAU Editores (Cáceres). Nos hablaron de sus inicios, de sus proyectos, de su filosofía a la hora de editar. Algunos de ellos apoyaron su intervención con proyecciones audiovisuales. Todos aprendimos. Allí mismo, en el Museo, y tal como teníamos programado, también se proyectó el documental producido por Uberto Stabile Tan lejos de Dios, tan cerca de Estados Unidos: poesía mexicana en la frontera norte, un documento socio-cultural impactante sobre la poesía que se hace en una de zonas fronterizas más peligrosa del mundo.

Entre las ponencias y el recital teníamos preparada una cena informal en el Bar Poppy, situado en la Plaza de la Concepción, donde sus propietarios, Montse y Miguel, pusieron todas las facilidades para que los participantes de EDITA Nómada pudieran cenar bien por un precio asequible. Debido a las características del local, la cena se convirtió en un espacio más que propicio para que los participantes, en un ambiente distendido, pudiesen conocerse e intercambiar opiniones.

Por otro lado, en el casco histórico, Leandro Lorrio, propietario de la Cafetería-Galería de Arte Los Siete Jardines, también nos cedió amablemente su local para celebrar el recital poético que daría lugar a partir de las once de la noche.

Los participantes del recital poético fueron Alonso Torres (Cáceres), Rosa Martín (Cáceres), Fran I. Mendoza (Badajoz), Víctor M. Jiménez Andrada (Cáceres), Eladio Méndez (Mérida), Vicente Rodríguez Lázaro (Cáceres), María Antonia Sanz Martín (Segovia), Ángel Calle (Córdoba), Jorge Galán (Cáceres), Uberto Stabile (Punta Umbría), José Viera (Cáceres), Fernando Pessanha (Vila Real de Santo António, Portugal), José Cercas (Santa Ana, Cáceres), Ana Mª Castillo (Mérida), Pablo García Malmierca (Salamanca), Francis Acedo (Cáceres), David Santiago Rodríguez (Cáceres), Carlota Montero (Cáceres) y una servidora, María Carvajal. Cada uno de ellos puso su granito literario en un recital donde hubo poemas de amor, poesía social, poesía experimental, prosa; cada autor con su estilo y todos bajo una armonía casi espiritual que se respiraba en el ambiente.

Aparte de los participantes que recitaron sus textos, también hubo dos actuaciones musicales: la soprano Rosario Cruz abrió el recital con un tema lírico que sorprendió por su fuerza y ejecución y el pianista Fernando Pessanha nos deleitó en mitad de la noche con dos piezas compuestas por él. Ambos, Rosario y Fernando, amenizaron el acto encajando perfectamente sus intervenciones dentro del marco poético en el que nos encontrábamos.

Al final, todos terminamos con una sensación de plenitud y emoción en un encuentro en el que se forjaron nuevas amistades y donde nacieron nuevos proyectos. Sin duda, la segunda edición de EDITA Nómada Cáceres fue un éxito gracias a todos los participantes y asistentes.

No puedo terminar esta crónica sin dar mi agradecimiento a todas las  personas que hicieron posible este encuentro: A Cano, porque siempre me ayuda en todos estos berenjenales en los que de una forma u otra me veo envuelta de vez en cuando. A Pilar Bacas y Rosa Martín, porque también se implicaron directamente con algunas gestiones de la organización. A Juan Valadés, Leandro Lorrio, Montse y Miguel, por cedernos los espacios para desarrollar el encuentro. A Rosario Cruz, porque en el recital estuvo todo el tiempo pendiente del sonido. A todos los participantes y asistentes (tanto los cacereños, como los que vinieron de fuera), porque son imprescindibles, sin ellos nada habría sido posible. A todos los que, de forma particular o a través de los medios, difundieron el encuentro. A Uberto Stabile por crear algo tan bello como para que 22 años después siga emitiendo magia. A vosotros, Revista Madreselva, por permitir que lo cuente en vuestras páginas y compartir así esta maravillosa experiencia.

María Carvajal

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